«Esta pared solitaria queda demasiado lejos para atraer a quienes sólo sienten pasión por la técnica de alta escuela; y es demasiado imponente, por lo que la rehúsan quienes ceden a la tentación de un éxito fácil»
Patrice de Bellefon. Los Pirineos. Las 100 mejores ascensiones y excursiones
Victor se puso en contacto conmigo porque queria preparase para intentar subir al Montblanc este verano; por temas de agenda sólo teníamos un día, así que le propuse un par de opciones clásicas pero no le terminaron de convencer. «hombre, podemos intentar la norte del Perdido, pero es una paliza.» No lo pensó dos veces y allá nos fuimos. La cita fue a las dos de la mañana en Bielsa, conducir hasta Pineta y subir al balcón, adonde llegamos con las primeras luces. Allí vimos un par de cordadas ultimando preparativos y otras dos que ya empezaban el primer corredor.

Después de un pequeño descanso comenzamos la aproximación atravesando la vieja morrena, ponemos arnes, casco y crampones y encaramos la pendiente. Nos encordamos y superamos el primer resalte rápida y comodamente con una nieve dura perfecta.

En la travesía a buscar el segundo corredor hacemos una parada para reponer fuerzas y nos adelantan las dos cordadas que llevábamos al rebufo, aunque las volvemos a atrapar a la entrada del corredor; hay un atasco monumental! Nos lo tomamos con filosofía y hacemos un buen descanso hasta que nos toca a nosotros: el resalte de hielo está en las últimas y obliga a salirse al espolón de la izquierda. Progresar con crampones por la roca, aunque no sea dificil, ha hecho que todo el mundo vaya muy despacio y por eso había ese tapón.

Una vez que salimos a la arista, terminamos de subir a la cumbre, comemos algo y para abajo. Ya es un poco tarde y la nieve está transformada, por lo que caminar se hace más pesado. Bajamos al collado del Cilindro y pasamos al glaciar otra vez. Decidimos no parar a descansar en el balcón de Pineta; hay un nevero en el embudo, así que lo cruzaremos con crampones y después ya pararemos a quitárnoslos. Un descanso y terminar de bajar con el piloto automático: después de quince horas de actividad llegamos al coche.
Muy buen (y largo) día pasado en la montaña, gracias Victor!!